Sigo en deuda
con todos los callejones de la ciudad,
Madriz es un agujero negro lleno de vómitos recientes,
el único lugar donde volver.
Madriz, es una prostituta con las medias rotas
y un hueco para los borrachos que se olvidan
de que el amor es un cáncer doloroso e infiltrante.
Pero estoy tratando de esquivar todas las alcantarillas,
porque sé que las ratas esperan ansiosas
devorar mi jóven y bello cadáver.
3 comentarios:
Algo late todavía por ahí dentro, normal que nos reclame. A ver si coincidimos , un besazo artista !
Tal vez las estrellas espanten los vertigos.
Un beso.
Madriz, el lugar donde aún se da de comer a las ratas.
Saludos
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